"Política y Fomento en la Andalucía liberal", escrito por Antonio Luque Ballesteros, es una obra que pretende recuperar del relativo olvido en que se encuentra la figura de Agustín Alvarez de Sotomayor Domínguez, militar perteneciente al linaje lucentino de la casa de Hust, que desee un marco local alejado de los grandes centros de decisión fue capaz de estar pendiente de los asuntos que preocupaban más allá de su entorno inmediato y de imbricarse en la apasionante tarea política de la construcción del estado liberal en España.
El libro ha sido presentado el pasado fin de semana en Puente Genil dentro de los actos organizados para celebrar- el próximo seis de octubre- la inauguración de la nueva biblioteca de la localidad que llevará el nombre del poeta Ricardo Molina. La presentación fue conducida por el concejal del Ayuntamiento ponteño Alberto Gómez y contó con la asistencia de las diferentes ramas familiares de los Álvarez de Sotomayor y del director del Servicio de Publicaciones de la UCO, Antonio Barragán. Una vez finalizado se abrió una pequeña exposición documental sobre el itinerario biográfico del personaje, organizada por Antonio Illanes en colaboración con los herederos del biografiado.
A través de esta obra, editada por el Servicio de Publicaciones de la Universidad de Córdoba, conjuntamente con la Fundación Juan Rejano de Puente Genil, se pone de manifiesto como, al menos durante una etapa de su vida, la que va de 1833 a 1846, Álvarez de Sotomayor dejó testimonio de su experiencia política como uno más de los liberales que, desde 1812, venían luchando por romper las "caenas" que otros vitoreaban. Al hacerlo nos dejó una mirada personal escrita desde la Puente de don Gonzalo, actualmente Puente Genil, en los momentos en que la persecución política o la lucha partidaria le obligó a recluirse en sus cuarteles de invierno.
Aparte de ello su figura puede también reivindicarse por su filantropía social, puesta de manifiesto en diversas ocasiones de las que son ejemplos la ayuda decidida que prestó con ocasión de la epidemia de cólera de 1834 en la que perdió a su hijo primogénito o el impulso dado a grupos musicales y teatrales con los que articular la vida social en la sala de representaciones habilitada en su casa familiar. Pontanés de adopción nunca tuvo tentación de cambiar el pequeño marco local por el de alguna capital, sin renunciar por ello a dejar su testimonio sobre los asuntos que preocuparon a sus conciudadanos ni a intervenir en los de interés general.
Luque Ballesteros. Especialista en el ámbito de la Historia Agraria, se ha acercado en varias de sus obras al estudio de las élites de la revolución liberal a escala cordobesa, analizando a través de los perfiles biográficos de sus miembros la integración de aquellas en las redes de poder político particularmente a través de su participación en la Diputación y en los órganos consultivos de la Administración de Fomento.