El guionista inglés Christian Routh, que está participando por segundo año consecutivo en los cursos Un Verano de Guión, tiene la certeza de que la calidad del cine en un futuro puede aumentar, si aumenta su conocimiento en torno al séptimo arte.

Según Routh, de la misma manera que en la enseñanza secundaria es obligatorio estudiar las obras de Cervantes, Shakespeare o Goethe, también se deberían incluir los guiones de grandes genios de la cinematografía, como parte de la Literatura. "Si los jóvenes estudiaran las películas como las novelas o el teatro podríamos tener un cine más profundo y más maduro en un futuro", indicó el guionista inglés.

Christian Routh, que trabajó como asesor de guión para la Agencia Europea de Desarrollo de Medios, donde dio luz verde a más de 1.500 proyectos, está analizando los guiones de cinco alumnos de Un verano de Guión. "El objetivo es desarrollar hasta el punto máximo los guiones de estos alumnos para prepararlos para la producción y financiación", indicó. Lo primero que debe entender un guionista es la necesidad de revisar su trabajo porque "no existe una primera versión perfecta de un guión", explicó el guionista. Además, para Routh el proceso de desarrollo de un guión puede suponer hasta varios años de revisiones hasta que pueda ser llevado a la gran pantalla.

Según este experto, para analizar un guión, es necesario estudiarlo desde dos puntos de vista distintos. Por un lado, habría que hacer una revisión interna del contenido, "examinando la estructura, los personajes, los tonos, los temas, etc.". Y por otro lado, se requiere estudiar el formato para el que el guión va destinado, el tipo de financiación con la que se cuenta para sufragar el proyecto, quién será el receptor de esa película, etc.

Según explicó, las correcciones más frecuentes que suelen necesitar los guiones que él está revisando están referidas al desarrollo de los personajes durante la historia porque hay muchos que no evolucionan; estructuras que no están bien definidas; preguntas que surgen en el primer acto y que no encuentran respuestas en el segundo acto; exceso de diálogos; insuficiencia de tramas secundarias y falta de originalidad y de conflicto entre personajes.

Christian Routh como parte de las actividades del curso, ha presentado la película Elizabeth, en cuyo guión participó. Entre otras películas que pasaron por sus manos figuran Orlando, Toto el héreoe, Rob Roy, Naced, Farinelli, The Cement Garden y Beraking the waves.