'La ciudad feliz', de Elvira Navarro
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5 años 3 meses antes - 5 años 2 meses antes #46
por club-lectura
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'La ciudad feliz', de Elvira Navarro Publicado por club-lectura
Decía Marta Sanz en su ensayo sobre literatura y política No tan incendiario (Periférica, 2014) que “estos pensamientos (…) son un oxímoron: textos que parten de la radical convicción de que la literatura ya no le importa a casi nadie y que a la vez pretenden hablar de la literatura desde un lugar que no sea su templo, su jardín vallado, su paraíso perdido.” Creo que
Elvira Navarro
(Huelva, 1976) estaría de acuerdo en aplicar estas palabras a sus novelas, al menos a las dos últimas (ha escrito tres): La ciudad feliz (Mondadori, 2009) y La trabajadora (Literatura Random House, 2014). Empecemos por La ciudad feliz, ganadora del XXV Premio Jaén de Novela, formada por dos historias que se pueden leer por separado pero que ganan en intensidad si se leen como un todo. En la primera, “Historia del restaurante chino La ciudad Feliz”, el narrador nos cuenta en tercera persona la vida de Chi-Huei, un niño chino que se queda con su tía en su país mientras sus padres y sus hermanos se vienen a España para abrir un restaurante chino (antes asador de pollos) y al que, cuando al fin se reúne con ellos, todo le es extraño. Por un lado no se identifica con su familia, con la que durante años solo se ha comunicado por teléfono y a la que únicamente le interesa trabajar y ganar dinero para así poder aspirar a tener una ¿mejor vida? Él, desde su adolescencia, no entiende ese afán obsesivo por el trabajo, como tampoco entiende que en el colegio todavía le sigan llamando “chino”, cuando cada día que pasa se siente más lejos de su país. A pesar del realismo que destila la narrativa de Elvira Navarro, el retrato de esta familia inmigrante que lucha por salir adelante en un país que no es el suyo no deja de ser, diríamos, que amable. En la segunda historia, “En la orilla”, hay un cambio de registro. Sara, amiga de Chi-Huei, nos cuenta en primera persona su obsesión por un mendigo que se encuentra a menudo en la calle y que irrumpe en su vida diaria y al que, con la curiosidad y falta de prejuicios propia de sus trece años, quiere conocer, llegando a darse una especie de persecución contraria, es decir, de ella hacia él. Se aparta de sus amigos y de su vida cotidiana, sólo quiere saber quién es y al final lo consigue. Cuando, presionada por la situación, se lo cuenta a sus padres, como no podría ser de otra manera, ellos, aunque lo intentan, no llegan a entenderlo y todo terminará, pero, y eso creo que es lo interesante, de una forma natural y sin dramatismos. Las dos historias tienen lazos en común: la edad de los protagonistas, el extrañamiento ante ciertas situaciones que no entienden y, sobre todo, la ciudad en la que transcurren. Si ya aquí se nota la querencia de Elvira Navarro por los espacios urbanos (de hecho su primera novela se llama La ciudad en invierno y esta La ciudad feliz) es en la tercera, La trabajadora (aunque bien podría haberse llamado La ciudad a secas) donde esta necesidad suya de describir el espacio físico en el que transcurre la vida de los personajes se hace más patente (incluso tiene un blog sobre el tema,
Periferia
). En La trabajadora, hay una disección minuciosa del barrio de Aluche, en Madrid, que es donde vive Elisa, correctora de pruebas de una editorial y que se las ve y se las desea para llegar a fin de mes. Por ello decide compartir piso con Susana, que no revela mucho de su vida profesional (aunque se deduce que también es “precaria”), pero sí de la personal. Ligada a esta precariedad laboral (en unos casos como causa y en otros como consecuencia), aparece un tercer factor determinante, como es la enfermedad mental de ambas mujeres que por momentos nos hacen olvidar, con su comportamiento, que tienen casi cincuenta años (y eso es lo triste de la historia) y que nos recuerdan a muchas personas que tenemos cerca (y eso es más triste todavía). Dice Elisa: “supongo que tendría que ser emprendedora, como dicen los manuales de los cursos para autónomos que he hecho, pero ahora estoy demasiado deprimida y acobardada”.
Os dejo el primer capítulo de La ciudad feliz (en pdf y txt sólo si estáis registrados), que si queréis podéis leer entera porque lo tenemos en la Biblioteca . A La trabajadora podéis acceder a través del prestámo CBUA (Catálogo Colectivo de las Bibliotecas Andaluzas)
Os dejo el primer capítulo de La ciudad feliz (en pdf y txt sólo si estáis registrados), que si queréis podéis leer entera porque lo tenemos en la Biblioteca . A La trabajadora podéis acceder a través del prestámo CBUA (Catálogo Colectivo de las Bibliotecas Andaluzas)
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Última Edición: 5 años 2 meses antes por club-lectura.
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